"El estiaje que apenas comienza en la región, sin duda que ya viene afectando la producción del ganado, donde tan solo en Tihuatlán se registran pérdidas de cabezas entre el 5 y 10 %.
Detalló que la muerte del animal se da porque en la actualidad las presas o arroyos se vienen secando y cuando bajan a beber agua, muchas se quedan pegadas y no pueden salir por aspectos de deshidratación, pérdida de fuerza, de ahí que al liberarlas la mayoría no soporta y muere.
“Por el momento los ganaderos como siempre realizamos lo propio, enfrentando solos esta situación, la cual este año a penas comienza con la incertidumbre de una fuerte sequía, obligando a sumar esfuerzos en la alimentación del ganado existente”, mencionó.
Agregó que por lo pronto se les mantiene con maíz, pacas de forraje, polinaza, cascara de naranja, aunque ya disminuye por la conclusión en la producción de naranja, entre otros factores como en la temporada invernal, donde también se enfrenta la mortandad de reses."
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