top of page
admintihuatlan

Tihuatlan Cultura: “EN TIHUATLÁN LAS PIEDRAS HABLAN”

Actualizado: 21 ene 2023


"Las piedras huastecas hablan y exhiben las grandes contradicciones de la sociedad contemporánea

El arte huasteco prehispánico no se debe apreciar en cuanto a lo bello o lo feo, a valores superficiales que observan las piedras arqueológicas solo como un objeto primitivo o artificial, estas piezas integran en sí mismas códigos, mensajes, una comunicación que los artistas que la plasmaron buscan su entendimiento, son gritos en el tiempo que llaman a su comprensión y mejor valoración, enseñanzas, y ¿o también advertencias?

Tihuatlán cuenta con una pieza arqueológica de inmenso valor, el día que se le dé la debida importancia, esto será un gran tesoro el cual deberá cuidarse bajo llave. Esta pieza es de la región huasteca y se trata de la Divina Mujer.

¿Quién es la Divina Mujer?

Es una escultura que se encuentra en Tihuatlán, posiblemente se trate de una gobernante, esto es por su tocado y sus atavíos.

Teotl Cihuatl Tlan “La Divina Mujer” está elaborada en roca híbrida, ígnea, cincelada en basalto, el cual es el material más difícil de tallar; mide 20 cm en su parte ancha, 15 cm de grosor y 150 cm de altura; corresponde al de una uzum tzalle (mujer gobernante).

La figura de la Divina Mujer, junto con otras dos esculturas, fueron encontradas en el año 1917 en los terrenos pertenecientes a los tres cúes en el km 314.5 de la carretera México-Tuxpan, en las coordenadas 653225.65E y 2289464.83N (hoy terrenos del parque vehicular del Ayuntamiento Municipal); el presidente municipal de ese entonces dio la orden para que las cuatro piezas fueran llevadas frente a la presidencia municipal para adornar el parque. Actualmente están resguardadas dentro de la presidencia municipal, donde se exhiben junto con otras piezas encontradas en el municipio de Tihuatlán.

En la antigüedad egipcia, las mujeres eran vistas y honradas como más altas y sagradas que un hombre. La mujer es la madre de todos, dando vida y enseñando.

Los antepasados creían que cuando un hombre lograra una gran cantidad de conocimiento, espiritualidad y poder, se le permitiría usar una peluca de pelo largo para simbolizar que había alcanzado un cierto nivel igual a una mujer."


Agradecimiento por su aportación y crónica al C. Mario Abraham Salas Aquino

49 visualizaciones0 comentarios

Коментарі


bottom of page